domingo, 15 de octubre de 2017

Sin rendición

Flor en el pecho

sangrante corazón.

que con sonidos desgranas las notas de un viejo tambor.

Sonido que se oye a lo lejos,

cánticos  de esperanza  bajo un ennegrecido corazón.

Lágrima  seca cae en tu rostro

quejido tenue, sollozo de rendición.

Desafiante te presentas  para aprobar mi perdón.

Las raíces  que te marcaron

ensordecidas se encuentran y están.

Doblegadas por un pasado, enterradas por un error.

Caminantes errantes  que marcan el paso de tu soledad,

como huellas que se desvanecen , como hojas secas en medio del mar.

Yendo a la deriva y sin rumbo

 así mi pena debo arrancar

acariciándome de nuevo el alma

y en las viejas hendiduras de mi rostro, una nueva sonrisa  encajar.

Esa  que despuntó algún día  y esa que me ayudará

a que mi despertar sea radiante y nuevamente

en  LIBERTAD.